En 2019 la agenda del agua en México tiene varios desafíos y hay temas pendientes por atender y que, a través de los años, se han vuelto tareas urgentes.

Abordemos 5 de ellos.

  1. Gestión de los usos del agua. 

Los volúmenes registrados no corresponden necesariamente con los efectivamente extraídos,  principalmente por la falta de equipos de medición y a las extracciones de agua no autorizadas, limitada capacidad de monitoreo y aplicación de sanciones. Según datos de 2016, 105 de los 653 acuíferos del país se encuentran sobreexplotados. La demanda es extremadamente alta y el recurso no se valora.

2.- Uso eficiente del agua.

Existe un reto importante en reducir los niveles de extracción y por ende de consumo de agua en el país. El uso público urbano consume una gran cantidad de agua siendo el segundo detrás del consumo Agrícola. Urge optimizar procesos, reciclar, utilizar tecnología.

3.- Gestión de las aguas urbanas.

El crecimiento poblacional y la concentración de la población mexicana en ciudades es un factor urgente de atender. Alrededor del 78% de la población nacional es urbana y gran parte de ella se ubica en Zonas Metropolitanas: tan solo el 40% de la población total del país se concentra en las 15 zonas metropolitanas con más de un millón de habitantes.

4.- Servicios de agua y saneamiento universal y de calidad.

México destacó en 2015 por ser uno de los países de Latinoamérica con mayores niveles de cobertura de agua potable y saneamiento (92% y 91% respectivamente). Sin embargo, bajo la nueva definición de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), que contemplan aspectos de calidad, continuidad y gestión de los residuos del saneamiento, dichas coberturas bajan considerablemente.

5.- Calidad de los cuerpos de agua.

De acuerdo con información CONAGUA el 32.4% de las aguas superficiales monitoreadas tienen algún grado de contaminación. La mala calidad de los cuerpos de agua se debe en gran parte a los bajos niveles de tratamiento de las aguas residuales, la inadecuada disposición de los residuos sólidos, y el uso de sustancias tóxicas que acaban en cuerpos de agua.

Muchos de estos retos, sin duda requieren de fuertes inversiones en infraestructura, pero, sobre todo, de mejoras en la gestión de los recursos, la implementación de soluciones ahorradoras de agua en la casa, oficina, corporativos y demás lugares públicos, en la toma de conciencia de la población en general sobre la situación urgente del agua en el mundo y tomar acción al respecto.

2 soluciones simples: Ahorrar agua a través de distintos productos y servicios y dejar de contaminar el agua utilizando productos biodegradables, esto, es tarea de cada uno de nosotros como ciudadanos sin esperar que el gobierno y las instituciones solucionen la problemática general del agua.

Con información de:

María Eugenia de la Peña /iadb.org

unwater.org/